sábado, 30 de mayo de 2009

Missing you...

Desde que me separé de ti te he estado echando de menos. Es curioso, ¿verdad? Antes de conocerte ya esperaba que me ibas a gustar mucho, pero jamás pensé que la atracción llegaría a hacerme extrañarte desde la distancia.

Últimamente el anhelo que estuvo ahí todos estos meses se está convirtiendo en una punzante añoranza a la que no parezco encontrar remedio...

Missing You

¡Malditas series tontas americanas!

viernes, 22 de mayo de 2009

Paz

PeaceOfMind

miércoles, 6 de mayo de 2009

1993 - 2009

Ya no volverás a esperar a que todos nos hayamos sentado a la mesa a comer para querer salir a la terraza.

Ya no volverás a quedarte dormida en posiciones imposibles.

Ya no volverás a seguir en la distancia a quien está barriendo la casa para comprobar que lo hace bien.

Ya no volverás a levantar la cabeza y a cerrar los ojos cuando te rasco bajo la barbilla.

Ya no volverás a perseguirme los pies cuando voy en zapatillas.

Ya no volverás a correr en círculos por la casa en tus cinco minutos diarios de locura, del comedor a la terraza, a la habitación, al pasillo, al comedor...

Ya no volverás a llamar desde la puerta a quien acaba de salir a bajar la basura.

Ya no volverás a mostrarnos esa mirada socarrona en tus ojos amarillos, como si ya estuvieras de vuelta de todo.

Grisona01

Ya no volverás a pedir que alguien te abra el grifo del lavabo para beber agua.

Ya no volverás a lamernos las puntas de los dedos con tu lengua, rasposa y suave a la vez.

Ya no volverás a recibirnos con maullidos de protesta cuando volvemos a casa después de dejarte sola uno o dos días.

Ya no volverás a restregar tu cabeza por mis rodillas cuando me agacho para saludarte, reconociéndome cada vez que vuelvo a casa y marcándome una vez más como tu propiedad.

Ya no volverás a soltar bufidos amenazantes a los invitados que intentan hacerte fiestas y acariciarte el lomo.

Ya no volverás a esconder las patitas bajo tu cuerpo cuando tienes frío.

Ya no volverás a adivinar la intención de mi madre ni correrás a esconderte bajo la cama antes de que te meta en la bañera.

Ya no volverás a meterte dentro de las bolsas de papel ni a asustarte de las de plástico.

Grisona03

Ya no volverás a pedirnos comida, discreta, dándonos con la patita blanda en el brazo mientras estamos comiendo.

Ya no volverás a salir a inspeccionar el rellano, la parte más misteriosa de tu mundo de cuatro paredes.

Ya no volverás a tenernos a todos en vilo paseándote tranquilamente por la barandilla del balcón.

Ya no volverás a caerte al patio de luces desde el tercer piso para hacerte sólo un rasguño en el morrillo.

Ya no volverás a dejar finísimos pelos de color gris en toda nuestra ropa.

Ya no volverás a liar una auténtica batalla campal cada vez que te llevamos al veterinario o cuando éste viene a casa.

Ya no volverás a quedarte dormida encima de nuestras chaquetas justo cuando tenemos que salir de casa.

Ya no volverás a preocuparnos a todos con los achaques de la edad y la mala salud de tus riñones.

Grisona02

Ya no volveré a maravillarme de la suavidad de tu pelo al acariciarte ni me volverás a responder con tu ronroneo agradecido.


La próxima vez que baje a mi casa, a Tarragona, sé que mi corazón esperará encontrarte en cualquier rincón, pero ya no volveré a verte.

Duerme, duerme para siempre, pequeña Grisona. Vuelve a la tierra y sigue brillando en nuestro recuerdo.

lunes, 4 de mayo de 2009

A vueltas con el saúco

Seguramente os acordáis de mi historia sobre un saúco parásito que crecía sobre un arce.

Bueno, pues al "arce" ha echado finalmente sus hojas y ¡he descubierto que no es ningún arce! Tiene hojas compuestas en vez de la archiconocida hoja del arce. Fijándome bien, el tronco tampoco se parece al de los demás arces y le crecen afiladas espinas en las ramas.

Robinia pseudoacacia

Estas hojas me han recordado a algunas acacias que crecían en Tarragona cuando era pequeño. Recuerdo que me gustaba mucho la forma ovalada de sus foliolos. Después de algo de búsqueda en internet creo que he descubierto la identidad real de mi árbol misterioso: se trata de una robinia (Robinia pseudoacacia), también llamada acacia de flor blanca. Aunque la robinia en realidad no pertenece a la familia de las acacias, guarda con ellas una gran similaridad.

Y ahora ya no estoy seguro de que el saúco haya frenado realmente el brote de las hojas de la robinia, o si, sencillamente, los arces son más rápidos en sacar las hojas que la robinia. Pero bueno, también he descubierto un par de robinias (¡sin saúco!) que crecen cerca. Ya tienen todas las hojas, ¡lástima que no me fijara cuando las echaron!

Tendré que continuar con mis observaciones campestres el año que viene...